martes, 26 de diciembre de 2006

Para G.A.P.A

Rodeo rodeado

Soles valles lunas
te verán pasar descuidado
en tus materias ignotas
porque dejaste ir a tu amigo, el tan amado,
por el mal camino del mandamiento:
La misma carne te dirá que eres un asco
o un sabio acuartelado.

Mírate bien que no es de pura puna
lo que te digo a las tres, a las dos, y a las una.

Tres puntos buenos
y estás rodeado.

Paulo San Páris.
29/xii/06.

Para G.A.P.A

Porque es sangre de tu sangre

Al cuerpo de G.A.P.A
dedicado.


Porque es sangre de tu sangre
te digo:
tú que vienes de iglesia en iglesia
de sacristías y aulas del dolor feliz
que comes sin sentir los mugidos
y en mí los llantos.
Tú que vienes con la extensión del carnicero
con las manos cruzadas
por la hipócrita gloria de una gula enraizada
a ti
hermano
hermana, te digo:

¿Por qué crucificáis?

¿Por qué sois un hermano animal
y no vais por el animal hermano?

Llevas al colmo las manipulaciones
de la Edad de piedra
y cuanto más te señalo las altas pieles incrustadas,
más bestia de amores profanos y de engaño
menos te pareces al Dios que todo lo consagra
pareces más hijo del hombre que del padre.

¿Por qué crucificáis?
¿Por qué crucificáis?
Por qué crucificáis a los viudos de los hogares.
Allí, entre las calles aquellos con sus
aullidos elegantes me saludan.
Salutención para ellos porque me los muestro
de frac, abanico y corbata
para tus ojos que no ven lo que ata.

Vamos en búsqueda de ellos:
Somos pocos, pero somos
los juglares que no se
someten a la prehistoria que divinizas.
Somos los de la piedad en el trigo
de las calles, en las lanzas de las calles,
los que tienen un puño arriba
y una pugna contra autoridades del bajo suelo
no queremos ver a los perros
caminando con patas de palo
ni menos a los políticos con el ojo tuerto
para nuestra denuncia sobre los amigos del hombre muerto.
Recuerda la sangre de tu sangre entra con furor en descontento.

Paulo San Páris
26/xii/06.

Para G.A.P.A

Preámbulo para una cena sin juicio

Este camino
ya nadie lo recorre
salvo el crepúsculo

Basho

I

No es de mi entender bajo
cómo te entregas al maltrato
cómo siendo tu condescendiente
pones la carne con sal aliñada, entre tus dientes
antes que la mente.
De pura sinceridad diré que displicente
es la forma como te engulles tu propia sangre
y con todo, más me pareces un demente;
que es un ser vivo, dices, y se nos dio
para tal efecto,
mas yo te digo, tu seso no halla dolor sufriente
o tu valor está en el frío incorrecto.

Por qué llevas tu cuerpo
a un despacho, a una extensión barata
de carnicero a carnicería
todo y siempre lo conviertes en Rodeo, ¡Qué grosería!
Y usted amigo no se ría
que no es chiste la cosa de la comida.

No eres de carne y hueso, acaso?

No eres la flor del buen sentido de Magritte en Chile
que por su hidalga caballería
fue reconocida por nación cruel, asesina y carnívora;
la sal, la carne y la hiel son tus tres santos, ¡Qué porquería!
Y usted amigo no se ría
que no es talla la cosa de sus comidas.

Un arrollado, un choricito, una prietita
se balancean entre tus pupilas,
gozarán aquéllas de eso, o sólo
las utilizamos nosotros para el llanto
que baja a buscar los trozos del descontento.

Tú y tu carnicentría del desfiguro no tiene límites que la razón guarde
si por ti fuera, Ronald creara cuarenta hamburguesas
de nombre extraño para engullírtelas
aún así no te bastaría, no te saciarías.
Y usted amigo no se ría
no vea a este preámbulo como un jugoso filete,
para tanto da, que se le ha metido la cabeza
tal despreciable deleite.
Se lo digo:
esto de la comida no es chiste
el Mc´ cuanto y el Mc´ cuento
se lo están comiendo vivo:
Ve, ya empezaron por su estómago y su bolsillo
y después, ¡Por Dios muerto!, qué será lo que le sigue el hilo.

II

Los graciosos te inventan una dieta
y un ladrido
y tu de puras "seguras"
quedas más que contenta,
pero compungida, de nuevo, por haberte perdido.
Te inventan un payaso, una cajita, un mundito
para que sigas con las manos en los ojos
por el feroz camino que de carne se hincha y apesta
y te vuelve moribundo
nauseabundo
errabundo
tremebundo
iracundo en el consumir estás, al centro del mundo.

Sácale los ojos a los árboles,
córtale el cuello a los bueyes,
descuartiza vacas, carne, piel, desosa manos e hígados,
pues sólo así te mantienes vivo y contento
encontrándote como cazador en un escenario;
cazador de la majadaría y algarabía.
Y usted no se ría
por mucho que parezca un arlequín,
no es gracioso lo que leo
en esta introducción a la cena de año nuevo.

Ahora sí, todo listo
sírvanse su filete
que yo después les pongo los añillos
del Papa como grilletes
del animal que fue reo
y ahora es su deleite.
El que quiera tragar, que trague,
pero yo no respondo
si en la noche el ser animal lo viene a penar
o crea que está soñando con que
un bufón se ríe en su cara
con un preámbulo que lo quiere, ante todo,
como un buen ser humano, peinar, y no matar.

Paulo San Páris
26/xii/06.



martes, 19 de diciembre de 2006

La traducción del tejido.

El neurópata bajel que en otros años
pudo ser el laurífero escondite de hechizos
y ahora se nos cae como la vida tras la vida,
como visa para Itaca:
No lo es.

Para encontrar la traducción del tejido
es que vamos de isla en isla,
sosteniendo el rito de las copas, los báculos, de expeler fuego.
Los ignícolas no se embrujaron del canto de las sirenas,
y el circo de Circe lavó todos los platos sucios,
llegando a pensar que al teatralizar las sogas
con que se sostenian las miradas en un punto
Homero podía llegar...

Todo termina por el principio.
La condición humana debe esperar
tras la mano millones de recorridos que esperan los peniques
para poder zarpar.

Ahora si traducimos nuestro cuerpo a un lengüaje
de dados y ajedreces sin jugar:
no quepa duda, nuestro bajel celestial de algún modo tendrá que bajar
con la nebulosa eléctrica o las islas leníficas,
para que la especie humana se pudiera atemorizar de la culpa,
que a favor del adelocéfalo nos ha hecho venerar.

Sólo se quiere dormir para nacer sin llorar?...

Los sostenes de mi madre se empiezan a quebrar
el tejido ya no dapara más
a lo lejos, tras el mar, algo quiere llegar.

Eli...Eli..

En el periplo el juego del mundo.
la cruzificción divina o la evolución de mi edad
para llamar a todo llamar.

Y yo que nada fui, sin sexo, sin detalle.
un Telémaco judeo-cristiano, vedme en los dos palos abrazados:
unos años más y este bajel
podría encontrarse con algunas calles
que serán grito de infortunio.
Los perdedores de nadie;
allí estaré por los siglo de los siglos en los gritos,
desarmando y armando la tela de mi madre
para que no se me olvide Nadie.

Paulo San Páris.
Pintura: "Aparato digestivo de una vaca" ( Sammy Benmayor, Chileno)



Reconstrucción de bifurcaciones



Tal vez las malignas sesiones de una mounstrua

no servirán para sostenerse el seso allá arriba,

pero la replica queda en un hogar uraño

a la cual no se le ha invitado:

alcanza para completar el hechizo antes iniciado

y terminar con la sedentaria espera

de los resentidos ante el trono de espinas.



El alocado designio de llorar ramos a una luna apeladora

no sirve.

Para tener sus versos dispersos:

no hay que confiar en los andenes de las formas inconclusas:

el firmamento no afirma,

que una chiquilla de Ipanema haya pasado tirandonos al boleo

sus despiadados poemas.



Todo lo deshojado por los ojos

se podría perfectamente hacer madrugar en una sombra nueva

y contra la dicción horrorosa

de hacer calmar las aguas,

una corana roja no existe sobre cada cabeza.

Pensativos los olivos malditos me muestran sus lados verdes

cortejando mi parte impía que en las espinas se cruzan;

y esto es lo último que converso antes de derrotar al adolorido

entre mis brazos de cerceno.



Y dónde tomar su copa hermosa?

Dónde trágicamente suave lo encuentro?

A fuerza de dinamitar el sentido del espíritu.

Un niño mira hacia abajo

conversa con su brazo en un poema

alienta el aliento con un rosal enterrado en su espalda,

se compone unos calidroscopios para mirar

a los nombres que en un puño ha llevado;

reconcilia su cuerpo con el prisma del paisaje,

se le han impartido enseñanzas

que la sacerdotisa, en devaneos constantes,

convirtio en estatuas:

y tiene la espera metida entre las piernas de otra sesión más,

donde él le entregue su poema

y la haga bella, moustrosa y maliciosa.



Paulo San Páris.

jueves, 14 de diciembre de 2006



Y el hombre sólo mira.

Dedicado a la comunidad lésbica de Chile.

El hombre servidor de Hermes
en la muerte,
trae a vivificar las bestias
que le programan y concienten,
deja en los basurales la razón
de las bruñidas escuelas
y solo se dedica a mirar el suelo.

Razón I:

Es irrazonable el desprecio
de tu geometría perfectamente pulida
y calculada en cenos torrentosos,
ombros de derrames, rostro
que entra y sujeta mi totalidad abrumada.
Aquellas pertenecias argumentadas para el despido de los dioses
en interminables secuencias lógicas
se me fueron entumeciendo, se me fueron haciendo
formas , en cuerpo:
y desde ahí no puede combatir mi clon tu baluarte
pues, proscrito, en su lengua salgo aullando tus descensos.

Razón II:

Es trueno estridente:

no pude era eléctrica y espaciosa
reventaba sonidos con un aire de belleza infiel
para el ciervo que bajaba a beberla
con su mirada en suelo.
yo sólo la gozaba en sus hechizos bajos
con su exalante olor a arcilla
y su carne fresca quemandome el vientre ignífugo:
palabras de sí misma.

El hombre solo nos miraba
cuando se fue haciendo polvo y quedamos las dos solas...

Yo me fui haciendo polvo...

Hasta concentrarme en ella
con unas ganas de darme por Da Vinci, una escena crematoria.
mirandolas el hombre dejó de amarse
y quedó atado y condenado a un polvo
de perpetuo gitano.

Heme aquí belleza mía, podrido y sosteniendo
las espinas entre las cienes, mientras las rosas de
Galilea crecen sin mi verbo.

Paulo San Páris.

jueves, 30 de noviembre de 2006

Fecundo

Dedicadicado a J.C.V

Sólo me conformo
con una sola cosa:
Que me digas quién te quitó la voz.

Paulo San Páris
Perenne allegro

Dedicado a J.C.V

Es querer de querubín
torturarse con tu cuello,
mientras la manzana aún
no ha sido puesta en Eva.

Yo te veo en la zona de pupila:
adentro dos gajos Judios
en encuentro;
y en las cienes por delante
ramos que bajan al lamento
del trono nebuloso.

¡Átame fragancia
que no es sólo ocio!

Los firmes iris con dos pasos trocados
al avance y las ganas en retroceso de perdurarte.

Paulo San Páris.
Mi Fe

No se debe amar de rodillas.
No se debe venerar los pies.
No se debe adorar sentado,
ni menos tambaleando el cuerpo.
Ni las manos abiertas,
ni cerradas
menos con instrumentos.

...Allí No hay nada...


Paulo San Páris.
Humano, más, humano.

Allá arriba, completamente lleno de humanoides
alguien tuvo el laboratorio de los dioses.
alguien, algún engendro, engendró a dios.
El problema gigante, será cuando alguien trate de averigüar
quién engendró al engendro.

Paulo San Páris
Holocausto

"La bestia tiene sus prácticas humanas":

Coce carne como si cosiera botones.
el daño se forma cuando cosan
botones con carne humana.

...todo está hecho...
Los toques de los que Sobran.

Transportamos las esquinas para vernos aislados
nos llevamos las manos a los rostros
para no vernos los cuerpos perforados.

El movimiento original del Ser se funda en el descontento
tal como el hijo que toma la tierra y la pasa al cemento
de los hundidos sabores, donde la furia del Arte se ha ce potro
en unos segundos ocultos, destellantes, carcomidos a campoabierto.

Si el verbo no enuncia las formas graves
destruyelo y conservalo como aullido elegante.

Veligarante. Anómalo, y consecutivo en la hierva
del último diamanante:
de aquellos que el Ser no pone espejos a delante
y queda más oscuro en rincones al hierro prolongado;
justamente para transportar las esquinas en los velos y vernos aislados,
agonizantes en el último temblor de letra,
como trovador o pájaro errante.

Yo perisférico es el que realmente, bravo, entra y arde.

"ESCUELA DE A(N)TENAS".*


Atenas=antena, el sector perisférico de La Serena donde me crié.
Distancia

¿Prisión de llanto o
embalce emblasamado?
Porque me fui
y no volvistes.

...el esmalte se me opaca
en la uña...

Paulo San Páris.
Problema

- Hay un día feliz, cierto?¡
hay uno cierto?
uno feliz, cierto?
dímelo, por favor!!!, dime que lo hay,
pero que nos dirá la noche
hacerca de ésto?.

- Tú sólo sigue.
Tú control

Dedicado a J.C.V

Tú y ése descontrol fulminate de raíces,
ése, que controla y embriaga
hasta los cenos aristócratas, ése que
hace gritar mi seso a los gritos fieros.

Tú que andas con la finura del centauro
y a tus piernas mis cadenas mueren.

Concéntrame las llamas, tus ojos dos hegemonías
en las lagunas uberrímas;
y por ellas voy subiendo
de encuentro a encuentro
te voy haciendo polvo los ritos prístinos,
y mientras no seas la entrega de Eva,
yo como rosario te llevo, como una corona
de primavera dolorosa, bella, temblante y exclamotoria.

Paulo San Páris

Olfato Próximo.

¡Lo digo por cuadragésima vez:
es irrespirable el olor de Chile!
Los médicos pasan fumando
Con cordones embalsamados de naftalina

Por las calles.
La gente toma cafés en las veredas
Mientras los hombres buscan comida
En los basureros.

¡Lo repito por quintagésima vez:
es irrespirable el olor de Chile!.

Paulo San Páris.




In-Verso Alterno.

A Arturd Rimboud
Para toda la vida.
Paul Verlaine.

Avanzas con los ojos como la eléctrica electra furia
Para besar el cabello triangular y mortuorio
De tu despedida al cuerpo
Pero aquél no fue más que eso,
Perla ardiendo en mitad del vacío al reflejo de mi cuerpo
Tu ya no vives, sólo sigues, pero no en mí.

Yo el otro, soy la otra...

El espejo sale de las manos
Conjeturando el sonido de los reflejos.

Yo la otra, soy el otro.

Paulo San Páris.
Réquiem para sonarse
Antes de rezar u orar.


Mi Jesucristo reventado para amar.

Hoy en las puntillas de los 2006 años de tu muerte...
(paradójico retrato, pero hay que seguir con el contrato)
Tengo menos idea que nunca dóndese cruzan las feroces líneas
y cómo se tapa las notas de la oscuridad.

No me han enviado el reciboDel ida y vuelta
No se a dónde voy y a dónde llegar
Sentado en un anden de un grito oscuramente precioso
Me giro para ver donde puedo descansar.
Ese torrentoso y oscuro
Marionetero
Que el mundo viejo no deja hilar
No me ha inventado otro viaje
Donde yo tome tu cuerpo y la maleta
No la sienta a-hogar.

Cómo reposar las cenizas?
Si en 2006 años el eco perverso del truco-cruz
No quiere cruzar los dos anacoretas en mi correspondencia.

Veo contradictorio tu paso
Desde este lado de tu existencia
El paso de la calavera no se agilizó en mi cuerpo
Que te quise dar.

Hace 2006 años, cuando eras infinito
Y yo un simple hombre crucificado,
un semita más, un Adán.

Paulo San Páris.
A la belleza: Muerte.

escrito en la calle Balmaceda,
junto a un mendigo amigo.

Belleza , a las rosas maestras aferrada,
Carmínica como la dulce tristeza.
Tumbo sonido en las galias promesa,
Cuidada de escorpiones, belleza herrada.

Ápteros llegan a los pupitres donde estuve,
En lecciones arrastradas comerán del germen
Vivo que en tus cumbres se ciernen;
Águila que gritó por las alas, y en ella sube.

Casi más plomo, que aire podrido:
En hermosa afinidad de la tierra prolongada,
Cruzada con las manos, cruz de los idos.

Sesguillo que cuando resbala avala
Y goza el silbo del decapitado carcomido
Lejos ya, cerca de los amantes de la nada.

Paulo San Páris.
05-08-06
¿Qué Cosa son las cosas? *

¿ Qué cosa son las cosas? ¿Qué son ? ¿ Amantes divinos
acostados a mitad de una luna vaga? ¿O es acaso
el espejo de noche, una piscina que se rompe con el lanzamiento del alma?
¡¿ Qué es dios mío?!, ¿Qué es este perpetuo fluir?

Heráclito, lo veo, cobrando su venganza despiadada
Asesinando a miles, que se rieron del oscuro eterno.
¿ Qué fue? ¿Cómo paso? ¿ De dónde vino, por dónde corrió y se
estrelló en esta pared blanca?¿ Qué fue un pensamiento regular? ¿O quizás una pisada sin nombre alguno antes de amoldarse? ¿ Qué propago el delirio, la locura, frenesí rotundo y
el tan preciado oro que dijimos todo es terminado?

¿Cuándo se le paso término a los nombres? ¿ Dónde partió
el verso perfecto y finalizó el atado a corrientes de mariposas marinas?
En éstas vorágines cielomareas cae el verso antelucano,
En mis engaños su cuerpo nunca lo veo terminado,
Es por eso que las cosas son como las cosas que fueron
Un inmenso paraíso destinado siempre al mismo;
Al mismo hombre que ahora confiamos: cree y juega
Sólo jugaba...
ADAN ME MIRA DESDE LEJOS PARA TOMAR MI CUERPO COMO UN RAMO...

Paulo San Páris

* Poema imantado del poema de Gonzalo Rojas
“¿Qué se ama cuando se ama?
Para que no te olvides de los nombres del cuerpo.

El té de Texas
Hace volátiles los templos feudales:
Giramos en unos descensos escondidos
Para la espada del guerrero público;
Aquél ya no es parte de los cigarros del cielo.
El silencio y la algarabía, no consumen espacio,
Sino que hace más prehistórico
Los signos y figuras en que jugamos.
Para conseguir los concordes habitantes
Es de necesidad taparse el rostro
Y ascender sin compra de oscuridades obscenas,
Por ello se irrita la piel de los amantes iguales.

Ahora, si llegamos juntos a la Tala
O al lapislázuli tocados, de seguro y
Más seguro es cuando lo enuncio, que lasAmarguras de las subidas flotantes
Quedarán en los pies de los habitantes.
El silencio de los parques se hace presente
Y no hay trasmigración para los estultos
Que visitan a las sociedades en las páginas
De los ladinos abanicos persas;
Pues, allí la mariposa aparece sin sus
Últimas alas, réquiem que nos hace falta
Para que el trigo muela lo que el oro unido
Ha hecho alabanza de holgazanes.
Y eso es lo yo deseo, que el otro vuelva
Con su carne a cortarme las ganas subterráneas
Para que, en los términos de una cornucopia
Yo no caiga;Y ese hombre flotante de vida
Transpase lo obsecuente, más allá de su bestia abultada de cielos,
Escabrosamente interminable.

Me reconcilio cuerpo para
Tus nombres en los trajes no venerar;
Y ése, aquél,Que se esconde en los perímetros de la ciudadela cortada
Es a quien le ofrezco el lirio rojo, propuesto en la frente:
Para en las glorias del espíritu junto los timbres concentrar.

Paulo San Páris.
Homo-Sapiens

El hombre está solo. ¿Qué quiere hacer el hombre?
No sé.

El hombre está con hambre. ¿Qué quiere comer el hombre?
No sé.

El hombre busca en la penumbra. ¿Qué quiere buscar el hombre?
No sé.

El hombre pregunta una respuesta. ¿Qué quiere el hombre?
No sé.

El hombre cree en ciencias. ¿Qué quiere creer el hombre?
No sé.

El hombre está adolorido. ¿Qué quiere hacer el hombre?
No sé.

El hombre quiere estar acompañado. ¿Qué quiere el hombre?
No sé.

El hombre quiere reconocerse bestia, holocausto, mujer... ¿Qué desea el hombre?
No sé.

El hombre busca una búsqueda. ¿Qué busca el hombre?
No sé.

El hombre no sabe lo que quiere. ¿Qué quiere el hombre?
Saber, salirse, correr. No saber que todo lo quiere.

Paulo San Páris.
1973...

Vimos a los leones surcar los cielos
de un Septiembre agonizado...
Eufóricos torbellinos
asaltanos los nombre y los números
en que gozabamos.
La intersección hilarate de cielos mostró los esqueletos
y las estrias derramadas.
Una canción compleja.
Una ecuación dispareja...
Y así los ríos pusieron auxilangoy termópilas,
en ves de llamado...
siguieron clavando los trajes de colores profanos;
donde las estrellas hacen al ombro cada vez más largo,
como si un demonio maestro le avalara la tesis:
que el íltimo clavo se tiene que precisar en los iños (por la razón o la juerza)...

Paulo San Páris.
Nombramientos de Don Quijote

In memoriam al maestro Cervantes
y su hechizero Don Quijote.


Volcados los cuerpos y hundidos nuestros rostros
en el jardín infiel, adormecidas tierras de los otros.
comencemos con nuestras maldiciones prístinas:
anillos trocados de hirvientes transacciones finas.

El segundo nivel de ventaja violante: te explicará y encizañará.
¿Cuántos volcanes y Rabias de mar salía de tu depositario?,
besos a él, gracias a los juicios de cárcel,no me volverá.
Tomaré la opción firme del hidalgo,cual desparramado sagitario.

Agora, el desquite lo harán mis dos tercetos
tus primeros versos no me valen la gana
pues apelaste a la del Toboso, que alza tu Diana.

Recapitulo que si quieres ser de los perfectos,
entonces Sancho tu sexo debes amarlo "en cana",
pues de puro lerdo no crees que soi yo el Quijote de los tuertos.

Paulo San Páris.

martes, 28 de noviembre de 2006

Por sus ojos un muerto me validan.

Dedicado a J.C.V.

Sufro el vacío agónico que está a mi lado
como un torso herido, como un dorso humeado.
Lo sufro, y lo sufro y lo palpo en dos besos bajando;
lo busco entre las frentes que no he mantenido
y de ésas es sólo una la que está marcada
por mi nombre y mis temores, de ella un rosal de Lorcas locas
bajan a encontrarme desnudo entre las flechas del niño Valente errante.

Sólo es una de las sombras
que sigo: busco dolor pedecedero
para mis nombres poder nombrar,
y sacarme la cabeza del abismal, caótico y temblante.
Un tenerlo, como joya persa.
Sólo tenedlo, mientras sus brillos
me enloquecen las danzas, que por ellas bailo.

y de ojos a pies toco una mejilla
un agua nocturna de sal-muera púrpura con un labio a tiemblos,
buscando los fuegos de eclipses eternal
espara no dejadme que en las crujientes cascadas de arañas termales
sin razón entre en ellas.

Por sus ojos un muerto me validan
por sus ojos yo no diré nada
hasta que atraviese su centuria de rosio
que de pantanos levantados me suspende.

No diré los sonidos fuertes,
pues ellos en ogros sangrientos y sedientos
han de convertirme.

Por tus ojos un muerto me validan
por tus formas el verso te convida
te siente y te señala.

por tus formas es que yo ruego no estar
con el corazón entre los vértices de las manos turbias y
las pupilas clavadas a un árbol de daguerrotipos.
Por tus horas, tus centesimas, tus milimetros acentuados
con los rayos de maduras espumas
son por lo que yo pido esta ascención;
que el verso último no me sea avaro y marcado
ya todo que dio vueltas con las sangres extasiadas,
se extienda lento, muy lento
casi tocandote como en el segundo del beso.

Paulo San Páris.